jueves, 9 de abril de 2015

En el útero




Mi pecho espacioso se asfixia, se sobreasa, se trapica.

Te miré (en aquel lugar)
Todas las veces que quise,
Todas las que se me dieron en ganas…

Siento en mí una ganosa culpabilidad de tener cerca,
De olerte, de oírte, de entenderte,
Que deshace los imperativos categóricos,
Que quema mi alma a fuego lento
Que perturba mi conciencia,
Mi inconciencia,
Mi razón lógica y hasta la simbólica…

Absorbí todo el aire del cosmos,
Para sacarte de mi alma en un soplido,
No puedo contenerte (pienso…)
Pues ya tengo contenido.

Los deseos laten en mi corazón,
En mis oídos, en mi cabeza, en mi tórax
Ya no tengo razón, solo hay pasión,
Estoy enloquecidamente apasionada,
Peligrosamente apasionada,
Y a mí, la pasión me manda…

Espérame en el útero
Y no pierdas la cordura,
Que el tiempo no es un número,
Y yo  te  llevaré al lado oscuro de la luna.